
“Cuando se suprime la autoridad del padre,
la vida se convierte en un laberinto sin salida para el hijo”
Erich Fromm, El miedo a la libertad
Bien sabemos que vivimos en un mundo que a menudo parece empeñado en deconstruir cada pilar de su propia estructura, y entre ellos, la figura del padre ha emergido como uno de los blancos más recurrentes en las últimas décadas. A las puertas de la celebración del día del padre en Argentina, este 15 de junio, se impone una profunda reflexión sobre cómo el rol paterno, y por extensión la masculinidad misma, ha sido sistemáticamente bastardeado por ciertas corrientes ideológicas que, bajo el paraguas del progresismo posmo progre, han sembrado la duda y el desprecio sobre lo que alguna vez fue un pilar fundamental de la familia y la sociedad. No se trata aquí de añorar un patriarcado opresor, sino de discernir la diferencia entre la crítica necesaria y la anulación ideológica.